Cruzando el Cìrculo Polar Àrtico!!

Las inclemencias meteorològicas (parece haber llegado el invierno, aunque aquì nunca se sabe) prentenden, sin conseguirlo, ocultar el privilegiado entorno que he recorrido estos dìas... aunque hay que reconocer que el goce que supondrìa hacerlo en dìas soleados no tendrìa precio...

Como dicen aquì, esto es Noruega y no se puede cambiar... las previsiones meteorològicas no son fàciles y se equivocan incluso hacièndolo por horas...

En fin, que ha tocado dìas nublados, con lluvia, a veces fina, a veces fuerte, a veces con viento, a veces... a veces... aquì de todo y variado... con lo que a apertrecharse toca, tratando en todo momento de estar lo màs confortable posible... y no siempre es fàcil.

El terreno discurre por la conocida carretera turìstica (asì la denominan) N17, que costeando recorre un maravilloso entorno. No hay dìa que no tenga que coger un ferry, sino dos... asì como atrevesar tùneles, de momento entorno a los 3 kms.

Han sido dìas de recorrer zonas con poblaciòn muy escasa y dispersa, granjas aisladas, pueblecitos de pescadores (ahora destinados muchos al turismo)... baste decir que uno de los dìas en 100km no me he encontrado con un sòlo lugar en el que comprar comida... aquì es donde uno agradece llevar la despensa con reservas suficientes.

Es quizàs la semana màs dura de todo el viaje, pero uno despuès de tanta mutaciòn y tanto cambio a lo largo de estas semanas, acaba por habituarse a todo y la dureza de los dìas de lluvia se asimila y se sobrelleva lo mejor posible...

Tambièn empiezo a encontrarme con ciclistas que van o vienen de Nordkapp, con los que intercambio impresiones y siempre se aprenden cosas, consejillos y sobre todo alegrìa por sentirme "identificado" con congèneres de mi condiciòn.

Empiezan a aparecer los grandes ruteros, con grandes viajes hechos o por hacer, que siempre resultan interesantes, como el de un holandès de Maastrich, Luck (http://www.europeanbikechallenge.eu/).

Y se cumple tambièn uno de los hitos del viaje, cruzar el paralelo 66grados33minutos, o sea la lìnea a partir de la cual es posible ver el sol de medianoche en algùn momento del ano, esto es, el Cìrculo Polar Àrtico (una pena que se cruce en ferry).

De algùn modo, y aùn queda quizàs lo màs duro, sobre todo por lo climatològico y por los relatos de otros viajeros, ya se ve Nordkapp en el horizonte (muy en el horizonte), si todo va como hasta ahora... pero antes y en quizàs un par de dìas otro de los hitos del viaje: las conocidas islas Lofoten, tan renombradas y tan visitadas en estas fechas... veremos si cumplen las expectativas.

Empezando a estar impresionado!!

Muy especial la estancia en Trondheim, con albergue de peregrinos incluida, con un trato de privilegio por parte de toda la gente de la oficina del peregrino, en especial Eiler, con quien tuve la oportunidad de charlar largo y tendido sobre los distintos caminos de Europa, en especial el que lleva a Trondheim y Rolf (el pàrroco)... trato exquisito e inolvidable, por supuesto. Muchas gracias por todo.

Trondheim es un hervidero de gentes, de turistas de Espana que se ven atraìdos por mi bandera, y que sorprendidos, se interesan por mi viaje. Tambien punto de encuentro con otros viajeros en bici, de todas partes, como dos polacos que van a Nordkapp (padre e hijo) para volver por Finlandia, Estonia... etc... hasta Polonia, de donde han salido, o una familia que viaja con su hijo de 16 meses y un perro, con el que hace tres anos, durante todo un ano, viajaron desde Alaska hasta Mèxico.

Y a partir de ahì, mentalmente comienza (al menos mentalmente), un nuevo viaje... que utilizando el sìmil con el Camino de Santiago, mi Nordkapp serìa el equivalente a nuestra Finisterre... los que conozcais el Camino sabèis perfectamente a lo que me refiero... aquì varìa un poco la distancia, pero en esencia su significaciòn es muy parecida... continuar la direccion que uno ha estado siguiendo durante tanto tiempo (en este caso Norte) hasta que la tierra se acaba.

Y ya es difìcil, pero debo admitir que la grandiosidad de la Naturaleza me sobrecoje e incluso debo reconocer que en ciertos momentos me emociona... y me hago consciente del privilegio que supone poder observar y "sentir" todo lo que tengo a mi alrededor.

Unos dìas la lluvia acompana el viaje, otros el sol, el tiempo se confirma como absolutamente variable... como dicen en Trondheim "aquì puedes tener las cuatro estaciones en un mismo dìa"... y por los dìas que llevo en este paìs puedo dar buena fe de ello. La belleza del paisaje permanece invariable, es distinta, aunque sin duda me quedo con los dias soleados y sobre todo con las primeras horas del dìa.

Las distancias entre pueblos se agrandan, en un dìa en el que recorro entorno a 90-100km puedo encontrame con apenas 2 o 3 lugares en los que poder comprar comida. Tambien se conrfirma lo que me habìan comentado. Nombres que aparecen en los mapas no significa que sean siquiera lo que entendemos por "pueblo", son apenas 4 casas (contadas), pero que sin embargo aparecen como poblaciòn... que lo es. Esto hace que necesariamente uno deba ser previsor en el avituallamiento, sobre todo lìquido, para una etapa, o incluso màs.

Las senales indicando la posibilidad de que se crucen renos hace tiempo que las veo e incluso habìa llegado a ver alguno, que "huidizo", ràpidamente desaparecìa... hasta hoy, que sin ningùn reparo posaban para la foto, sin inmutarse apenas.

Una vez màs, me encuentro con la grata acogida de una familia que vive y trabaja en una granja (de izquierda a derecha, Signar, Liv, Mona, Evan, Svein) donde me paro tras recibir el saludo al ver mi bandera... a partir de ahì viene la invitaciòn a cenar y posteriormente a plantar mi tienda en su jardìn, al lado de su casa...

Una vez allì, disponen de casa de huèspedes, adonde me invitan a quedarme esta noche, incluso a probar una sauna noruega (vaya privilegio) y genuina leche de la propia granja... la ùnica palabra es, por supuesto, gracias... es increìble... una vez màs.

Curiosamente, Liv (la abuela, segunda por la izquierda), ha hecho dos veces el camino de Santiago y precisamente el mes que viene lo inicia (con 73 anos y una vitalidad desbordante) desde St. Jean de Pied de Port (antesala de los Pirineos)... Que pequeno es el mundo!!

Por cierto, se confirma que la pesca va viento en popa... me estoy emocionando con el tema... dure lo que dure, me divierte y me entretiene... las largas distancias, la poca gente hacen que el tiempo se pase mejor con actividades alternativas a la bici... la ùltima vez cuatro truchas... buenìsimas por cierto.

Comentarios:

• Hemanita, poco que decir... prontito, si no hay novedad, estarè de regreso.
• Manoly, muchas gracias... disfrutarè cada minuto de los que me quedan de viaje.
• Luìsa, Juan... se me acaba el tiempo para las respuestas... me esperan para tomar unas pastas recièn hechas... ya os contarè... se agradecen mucho vuestros comentarios.... en serio.